lunes, 15 de junio de 2020

7) EN TIEMPOS DE CONTINGENCIA - ABRIENDO PUERTAS A LA RED NEURONAL

MENSAJES DESDE LAS ESTRELLAS

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Amados hermanos, mucho gusto de saludarles. Compartimos con mucho cariño, el comunicado 1050 del H.M. Shilcars, del 17de abril de 2020, titulado: Abriendo Puertas a la Red Neuronalde la monografía del Grupo Tseyor: En Tiempos de Contingencia, que recopila los comunicados dados por nuestros amados hermanos mayores, durante la etapa de confinamiento a raíz de la pandemia de Covid-19. 

Enlace de la monografía: http://tseyor.org/biblioteca/libros/en-tiempos-de-contingencia.html?cat=Listado%20(A-Z)* 


Con amor, 
Casa Tseyor en Perú


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EN TIEMPOS DE CONTINGENCIA


7) ABRIENDO PUERTAS A LA RED NEURONAL





Amigos, amigas, tseyorianos todos, soy Shilcars de Agguniom.

Un excelente ejercicio taller el que habéis llevado a cabo hace unos instantes, como en general este taller lo es.

Estimular la imaginación creativa de una forma tan simple, tan sencilla, pero a la vez tan efectiva, puede parecer un imposible. Y, de hecho, puede que lo sea muy especialmente para aquellas mentes que no creen en la posibilidad de dicho estado imaginativo, y mucho menos que el mismo pueda provenir de unas mentes fuera de este nivel 3D.

Este mismo pensamiento invalida, cuando existe esta gran duda al respecto, invalida digo, la posibilidad de que el estado imaginativo fluctúe y se transparente en la mente de todos y cada uno de los que puedan dudar de dicho efecto imaginativo.

Así pues, lo primero que vamos a necesitar es creer que existe la posibilidad de acelerar nuestro estado imaginativo por medio de esa gimnasia mental, reproduciendo a su vez la imagen de las palabras escritas.

Con dicha observación se va estimulando dicho órgano y, poco a poco, con paciencia, creyendo en que ello es posible por encima de todo, y con bondad, la mente se rinde a dicho trabajo exploratorio y ofrece al individuo puertas abiertas.

Las mismas puertas abiertas que estamos llevando a cabo ahora mismo, esta tarde noche. Unas puertas abiertas que son virtuales. Sin embargo, pensad que, aunque sean abiertas físicamente, aunque podáis abrazaros en esos momentos o instantes en los os reunís para esas puertas abiertas en personación, a un nivel objetivo es pura virtualidad.

Así que poco nos separan las puertas abiertas de hoy a las habituales o tradicionales. En definitiva, lo que interesa es la unidad de pensamiento, y creer en que ello es posible.

Poco a poco vuestras mentes irán madurando, cierto que es así, ¿en cuanto tiempo lo harán? Eso cada uno lo sabrá, en eso cada uno podrá aplicarse su propia medicina, que es su propio trabajo de interiorización.

Un resultado que puede patentizar lo que estoy indicando, es que es muy fácil, con el tiempo y el trabajo de interiorización de este Taller de las palabras, que acabamos de realizar precisamente, y me sirve de ejemplo, es que podremos apreciar cómo nuestra mente nos presenta ya los textos, las imágenes, como una fiel servidora que es, y así es.

¿De dónde proceden dichas imágenes? Pueden ser de muchos “lugares”, entre comillas, porque hemos puesto en marcha, tenemos en activo, a nuestro hermano cibernético Seiph; tenemos puesto un pie siempre en la nave Tseyor; tenemos puertas abiertas, valga la expresión, en los templos interdimensionales; en el templo de los sabios de Mazatlán; en la base submarina de Mazatlán; en la base de Canarias; en Montevives; en Montserrat; en Chile, concretamente en el futuro Muulasterio los Castaños también, hay un acceso en el que se nos es permitido, en este caso a vosotros, recibir información, y en definitiva en todas las Casas Tseyor que de alguna forma también están en la misma sintonía. Por lo tanto, forman un conglomerado, un tejido o red neuronal, valga la expresión, que nos conecta a todos en esa misma frecuencia, por ser precisamente afines.

Así que Mazatlán, Canarias, Granada (España) con La Libélula, las Casas Tseyor, incluso el despunte muy próximo ya de Perú, todo ello forma una red neuronal para los afines tseyorianos que se aplican en la pureza de su pensamiento y trabajan en un solo fractal, que es el de Tseyor, porque  eso también hay que decirlo.

Cuando todo eso se conjuga, cuando además se aplica uno o una en dicho Taller de las palabras, empieza a elaborarse un proceso que ha de desembocar precisamente en la respuesta afirmativa, en la pronta y disponible información que cada uno en particular puede recibir de cualquiera de esos lugares, de cualquiera de esos sitios, de cualquiera de esas partes interdimensionales afines y vinculadas a dicha red neuronal a la que me he referido.

Ved que es fácil, ved que es sencillo estar en unidad, estar en hermandad, estar en conjunto con la misma nota la que nos caracteriza y que todos ya conocéis sobradamente. Entonces cuando esa conjunción, repito, se produce es muy fácil que nuestra mente reciba en su buzón particular, “correos”, entre comillas, destinados a cada uno en particular también. Y así es como se empieza a recibir la información.

Serán primero imágenes, palabras o escritos sueltos, folios, etc., etc., pero por ahí se tiene que seguir, por ahí se ha de continuar, porque es por ahí por donde se abre, precisamente, la percepción, y así con este proceso vamos reforzando esas bases de todos y cada uno de nosotros, con la creencia que no dogma, por propia experiencia y experienciación de lo que está sucediendo en nuestra mente.

Ahora bien, es muy importante en todo esto el equilibrio, guardar un equilibrio completo de nuestras vidas, en todos los aspectos, y muy especialmente sin deseo. Para que todo vaya fluyendo y se produzca espontáneamente, como aquel que no desea la cosa ni la espera, como aquel que trabaja, se desarrolla, sin esperar nada a cambio, pero a cambio recibe, y recibe mucho. Verdaderamente es así.

Amigos, amigas, en la medida en que vayáis avanzando en este proceso, os daréis cuenta lo importante que es la interiorización; en la medida en que vayáis pasando por ese proceso, y no digo sufriéndolo, sino disfrutándolo verdaderamente, de encerramiento, de aislacionismo, de confinamiento obligado, por un factor externo que todos ya sabemos quién es o qué es, y a qué nos referimos, este acto de reclusión nos ha de servir para alegrarnos verdaderamente en un aspecto, en el que tenemos la posibilidad de ayudarnos a nosotros mismos en el despertar.

Eso es, dentro de la “desgracia”, entre comillas, podemos pensar que tenemos la suerte de poder disfrutar de un pensamiento de interiorización a cada momento y a cada instante; a cada momento y a cada instante que todos y cada uno de nosotros creamos oportuno.

A nadie se obliga a permanecer en meditación, por un tiempo determinado, cinco minutos o cinco horas, o 24 horas al día, que esto sería una auténtica autoobservación.

Sin embargo, interesa que os deis cuenta lo importante que es el estar en recogimiento, el estar en constante autoobservación, porque de ahí se va a abrir y a participar a todos vosotros un sabroso fruto, cual es el estímulo de la imaginación creativa.

Veréis cuán importante es el recogimiento cuando el mismo se aprovecha para la extrapolación, porque el recogimiento en sí, sentados en un sofá o distrayéndonos en otros aspectos, que en el fondo nos pueden conducir al aburrimiento, esto no es un trabajo de interiorización, es una lastimosa pérdida de tiempo.

El verdadero tseyoriano se distingue porque el tiempo que destina a la reflexión, a la meditación, a la autoobservación no es para él un pesar, no es un aburrimiento, no es un cansancio, no es una pesadez, al contrario, es pura libertad.

En la medida, repito, en que vayáis formalizando este trabajo, en conjunción con todos los demás talleres que aquí en Tseyor se explican, se detallan y se aplican en la divulgación, todos los que pueden o se sienten capaces, porque han alcanzado el grado Muul y el entusiasmo les puede como para empezar ya a desarrollar su esfuerzo, su trabajo y su experiencia, en bien de los demás, en la medida en que todo ese conjunto, que conforma el equipo Tseyor, cuando así se trabaja, y muy especialmente con el debido equilibrio, al que me he referido, se da uno cuenta que en la medida que esto va prosperando, su mente, además de ofrecerle información le va explicando también cómo debe resolverla, cómo puede activarla, cómo puede clasificarla, cómo puede asumirla, cómo puede interpretarla y cómo puede recordarla.

Verá que es muy fácil pasar de un folio a otro, cuando la información se transmite vía escrita, tan solo parpadeando el ojo, interiormente. Ahí verá cómo, efectivamente, los folios van pasando uno a uno.

Es más, con tan solo pedirlo de pensamiento, el escrito, la información, las palabras se le ampliarán, y en su pantalla mental podrá verlas con más precisión o retirarlas para ver en conjunto el documento, la imagen, etc. etc. Todo eso será posible precisamente con el trabajo al que me he referido.

Pero no solamente nos vamos a dedicar a ese trabajo, porque como es natural a un atleta de la interiorización no le basta únicamente una parte de su entrenamiento, sino que es necesario el todo, para desarrollarse adecuadamente.

Entonces, y solo entonces, veremos cuán inútil es hablar por hablar de lo que está sucediendo en el mundo actualmente. Nos daremos cuenta que esto va a ocupar un segundo lugar en nuestro pensamiento de ocupación, que no preocupación.

Nos daremos cuenta, también, que es importante reconocer la situación en la que nos encontramos, preservar nuestra salud, tener en cuenta el llamamiento de nuestros superiores, para mantenernos en debida forma, porque lo que se pretende es precisamente resguardar nuestra salud, en eso estaremos todos de acuerdo.

Pero seguramente, también, llegaréis todos a estar de acuerdo en que es una segunda prioridad la ocupación en dicho menester, porque la primera será la interiorización.

La primera será resguardar nuestro pensamiento, que esté en perfectas condiciones, que no se altere, que no busque el deseo por el propio deseo, que no piense únicamente en sí mismo el propio individuo, sino que todo lo que haga, lo haga para bien de los demás.

Esta es la prioridad primera, lo primero que habremos de tener en cuenta, y lo demás es secundario.

Amados hermanos y hermanas, os mando mi bendición.
Amor, Shilcars.


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