lunes, 29 de abril de 2013

43) “Psicología Transpersonal”– SEPARAR EL TRIGO DE LA PAJA


MENSAJES DESDE LAS ESTRELLAS
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Hola amados Hermanos:
Comparto con cariño transcripciones de la Monografía “Psicología Transpersonal. Mensajes de Sili-Nur”, que podemos hallar en nuestra Biblioteca www.tseyor.com

El enlace es:

Con amor,
Noventa PM
__________
Digamos basta ya a la
Inexorable recurrencia de vida
tras vida en una oscuridad casi total
del individuo. Démosle la visión completa
de su panorama espiritual. Enseñémosle
los primeros pasos  a seguir
por el camino de la evolución
espiritual.

SILI-NUR

43) “Psicología Transpersonal”– SEPARAR EL TRIGO DE LA PAJA

 

44. SEPARAR EL TRIGO DE LA PAJA

En la medida en que avance el proceso de selección de la propia filosofía del contactismo, empezarán a despuntar grupos.

Aquellos grupos que en verdad utilicen la comunicación telepática, con Hermanos de nuestro nivel, para avanzar en un proceso de interiorización y de alguna forma mejorar espiritualmente.

A través de esa misma selección natural, algunos grupos podrán considerar de nuevo sus expectativas y empezar a diseñar otros procesos.

Procesos en los que la habilidad o capacidad sea lo menos importante y, en cambio, la afectividad y efectividad de un trabajo de dicha naturaleza redunde, como es lógico, en la mejora espiritual.

Ya se sabe, en estos tiempos “muchos son los llamados y pocos los elegidos”. Y esto se verá.

En realidad la frase utiliza una terminología muy simple, pero en el fondo añade un símbolo adecuado para establecer un cierto paralelismo con la psicología humana.

El hombre busca y gusta de probar diferentes “platos”, diferentes cosas, diferentes acciones, porque realmente no se centra en un trabajo digamos de interiorización. Ello le aboca a tener que buscar entre muy diversos procesos, y como es natural, tal dispersión le confunde.

En esos grupos, las personas que los componen, cuando se dan cuenta de que sus expectativas, su búsqueda, sus deseos, no se ven cumplidos, porque tal vez buscan otros objetivos distintos, acaban por desaparecer.

Así es como, de alguna forma, se va separando el trigo de la paja. Así es como, poco a poco, quedan aquellos grupos que sí dan la nota adecuada de participación.

            No es más que la espera para que se clarifiquen el entorno y el contorno y, de alguna manera también, las gentes sepan concreta y fundadamente quién es quien, quiénes son, cómo son y qué tipo de nivel participativo puede obtenerse de esos grupos.

Ante todo, habéis de ser conscientes de que necesitáis trabajar la parte interior, la reflexión, la introspección, el análisis interno, para que de alguna forma vaya acomodándose este tipo de inquietud que hace que os mováis en busca de la Verdad.      

Esa Realidad que está ahí, aquí mismo, en nosotros, dentro de nosotros.

Hemos de tener en cuenta que nos hallamos en un mundo en suspensión, y esto quiere decir que las circunstancias estarán en cualquier punto, en cualquier lugar. Y nos tropezamos con ellas porque forman parte de la actividad de nuestra vida física tridimensional.

Circunstancias que a veces se nutren de nuestras propias limitaciones, de nuestras quejas, de nuestro cansancio, de nuestra angustia, de nuestra ira, de nuestro dolor, de nuestra apatía...

Incluso del celo excesivo en conseguir un trabajo, digamos perfecto. Ahí se desperdician también grandes cantidades de energía útil para otros menesteres.

Gastamos energía, nos roban energía, prestamos energía… Descuidamos energía y todo esto se centra en un poso de indiscutible confusionismo e ignorancia y, además, de desconcierto y descontrol.

Llegando al punto o extremo concreto de obnubilarse la mente, dejando una pequeña rendija únicamente para explorar ese otro mundo, esa otra gran realidad.

Obviamente, esa otra gran realidad la divisaremos, la observaremos, la conoceremos, la asumiremos, la comprenderemos. La analizaremos ampliamente. Y por supuesto no a través de una rendija.

Realmente, amigos, la clave de esa tan anhelada libertad, esa tan maravillosa realidad, ese mundo que buscamos de objetividad, clarificación, control, no estará disponible si no conseguimos erradicar completamente en nosotros cierta errónea actitud ante las circunstancias de la vida.

Se necesitan ímprobos esfuerzos para el control de la mente. De voluntad, sacrificio, renuncia... De lo contrario todo ello trae consigo en definitiva la gran represión de los sentidos.

Todo es más sencillo al dejar la mente tranquila, pausada y que sea ella misma quien nos aclare la situación.

Por lo tanto sí os recomiendo, si me lo permitís, que actuéis a través de vuestra propia consciencia.

Pero indudablemente nada debe preocuparos al extremo de volveros de espaldas a la realidad. Nada es tan importante como la pérdida de la consciencia, la pérdida de la identidad de uno mismo.

Claro está, todo es importante en su nivel, pero lo es más el control, el autocontrol. Pero este nunca se ejercerá sobre la base de la represión, del deseo, sino en la quietud del espíritu, y en la paz de un pensamiento libre y feliz.      

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