sábado, 23 de febrero de 2013

2)“El Ego”– LA VIDA ES UN FLUIR

MENSAJES DESDE LAS ESTRELLAS

***

Hola amados Hermanos:

Comparto con cariño transcripciones de la Monografía “EL EGO, que podemos hallar en nuestra Biblioteca www.tseyor.com




Con amor,

Noventa PM

__________

“Indudablemente no podemos 
eliminar de nuestra psiquis al ego, y esto 
es obvio por cuanto es nuestro propio pensamiento. 
Es más, es con el propio ego que podemos alcanzar un 
mayor grado de consciencia si somos capaces 
de sublimar la energía de su pensamiento.”

SHILCARS


2)“El Ego”– LA VIDA ES UN FLUIR

2. REFERENCIAS SOBRE EL EGO

ETAPA SILI-NUR

 

2.1. LA VIDA ES UN FLUIR


La vida la debiéramos tomar como un fluir. Como si un fluir de energía penetrase por todos los poros de nuestra piel, por todas nuestras células, para ir incorporando conocimiento a todos los niveles.
Verdaderamente, nosotros mismos y todo cuanto nos rodea forma parte de un inmenso holograma cósmico. Y, estamos interrelacionados de tal forma, que cualquier partícula atómica en todo el Universo remoto es al mismo tiempo parte integrante de nuestro cuerpo y mente. Del propio comportamiento y de sus acciones. 
Por eso es que cuando un ser encarna, toma cuerpo físico en esta tercera dimensión, su conducta ya viene determinada o programada por el propio holograma cósmico, y cuyos efectos le sirven al individuo para auto-observar sus reacciones ante un sinnúmero de situaciones que se le presentan. Situaciones que adrede se han vertido en su propio camino para hacerle recapacitar.
Principalmente en las dificultades y problemas, en la lucha diaria por la supervivencia, y también con las enfermedades, con las desdichas, con los disgustos, con la pérdida de sus seres más queridos, el ser humano empieza a  darse cuenta de que este mundo no es solamente para vivirlo y disfrutarlo sin más, sino que igualmente habrá de existir un componente neutral, pero de alguna forma trascendente, para que en realidad su vocación como ser humano se vea cumplida.
Con el tiempo y en la medida en que el ser humano reflexiona sobre su trascendencia, sobre el motivo del porqué está aquí, hacia dónde va, y de dónde viene, invariablemente va recibiendo respuestas.
Respuestas que pueden llegar a resolver de algún modo la incógnita de su temporalidad. Respuestas positivas, objetivas, que le lleven por un camino de clarificación, de perfección. Para que su comprensión acceda a espacios de pensamiento más profundos o elevados. Permitiéndole desapegarse cada vez más desde el punto de vista material, y empezar a comprender mucho mejor la realidad de su propio mundo tridimensional, holográfico, y por esto mismo, relativo.

2.2. SER CONSCIENTES DE NUESTRA NADA


Podríamos empezar por ser conscientes de nuestra nada. De que nada somos, conocemos o sabemos. Y es que nada del saber puramente intelectual nos es del todo necesario ahora, en estos momentos, en esta época, si lo que anhelamos es subir por ese imaginario escalón vibratorio del despertar de la consciencia.
Ignoremos, de alguna forma, pensamientos que puedan inducir a un afincamiento de la personalidad, a un reforzamiento del yo tridimensional, porque de algún modo estaremos dando alimento al ego. Esa masa egoica añadida a nuestra psicología, y que desvirtúa el pensamiento consciente y objetivo.
Es indudable que el ser humano de esta generación necesita, en el cambio cósmico que se está generando y que ya es evidente a escala planetaria, una transformación profunda de sus estructuras mentales. Y mientras estas se apoyen únicamente en digamos muletas de pura intelectualidad, el avance va a resultarle muy difícil.
Está bien que dispongamos de un vasto conocimiento sobre determinadas materias: matemáticas, física, química, biología… pero todo ello no es suficiente para el próximo salto evolutivo. Todo lo que alcanza nuestro entendimiento, que podemos tocar, oír, ver; todo lo físico y perenne, en cierto modo es relativo y por lo tanto ilusorio, maya. La realidad verdadera se encuentra en lo que aparentemente no existe, en lo “invisible” que no se ve y siente, y es porque está más allá de nuestros cinco sentidos.
Trascendiendo mentalmente este espacio ilusorio, hallaremos la Nada. Pero, ¡oh paradoja!, en esa Nada recrearemos nuestra realidad. Una realidad en un movimiento continuo, rico en procesos mentales sublimes.

º º º º º º º

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Tus aportes son muy apreciados.